Los hijos de Húrin; Beren y Lúthien y La caída de Gondolin, de J.R.R. Tolkien

He decidido hacer una pequeña reseña de la trilogía porque en verdad son libros bastante cortos y no darían para tanto pero sus ediciones y demás son muy similares así que no sé, me pareció buena idea. Los tres fueron regalos de Nirkhuz, Los hijos de Húrin porque sí y Beren y Lúthien y La caída de Gondolin por mi cumpleaños. No sé si lo recordaréis pero hice la reseña de los dos primeros y dije de actualizar la entrada con el tercero de esta nueva y última trilogía de Christopher Tolkien, así que sí, he añadido el comentario del último cambiando además alguna cosilla.

Los hijos de Húrin es la versión completa e ilustrada de la historia, porque no sé si se recordará que ya hablé un poco de Túrin en los Cuentos inconclusos de Númenor y la Tierra Media, pues esta historia aparece ahí solo que hay una laguna después del capítulo de Mîm el enano, saltando la parte de Nargothrond. Aquí se incluye completa, con ilustraciones de Alan Lee, prefacio, introducción que nos pone en antecedentes sobre la Primera Edad (ya que dan por hecho que el lector de este libro vendrá de El Señor de los Anillos y El Hobbit y no de El Silmarillion), genealogías, dos apéndices, una lista de nombres muy útil a tipo de diccionario para ir consultando, y un mapa de Beleriand. Además es un libro de tapa dura con sobrecubierta, que se me pasó comentarlo, y exactamente la edición de 2009, con lo que no es la nueva a conjunto con Beren y Lúthien (es mi vida, no tener una colección igual).
Los dibujos de Alan Lee pues qué voy a decir aparte de que me encanta este ilustrador. En el libro aparecen ilustraciones como a lápiz, que son las más abundantes pues hay una en cada inicio de capítulo, y luego ocho láminas a color. Siendo sincera no sé cuáles me gustan más. Las de lápiz son sencillas pero denotan la gran maestría de Lee pues consigue crear luces, sombras, espacialidad, con un contexto muy limitado tanto por el espacio como por los materiales. No sé, no sabría explicarme mejor. Los dibujos a color son distintos pero el arte es el mismo, porque a pesar de tener color transmiten las mismas ideas que los otros, son tristes, llenos de detalles pero simples pues los colores en verdad no abundan sino que siguen la misma gama cromática. Son bastante uniformes pero consiguen transmitir la escena que ilustran.
Y bueno, pasemos a la historia después de la gran charla sobre las ilustraciones. Los hijos de Húrin se centra en verdad en la historia de Túrin, hijo de Húrin y Morwen, ramas ilustres de entre los hombres, que en su etapa final se cruza con la de su hermana Niënor. El principio de todo comienza con Túrin niño y va evolucionando a medida que va creciendo pero sin duda Túrin es una especie de héroe trágico de esta Primera Edad, enfrentado directamente con Morgoth por la maldición que éste echa a Húrin y a todo su linaje. Sus andanzas le llevan por Beleriand y a pesar de su gesto adusto y solitario, Beleg lo acompaña, igual que también se encuentra y traba amistad con Finduilas y su padre Orodreth señor de Nargothrond, los proscritos, Mîm... todos ellos pasan a formar parte de su historia de una u otra forma. Ya comenté en algún momento que Tolkien se basó en el héroe Kullervo del Kalevala para crear a Túrin y es cierto que muchos detalles se asemejan en las personalidades de ambos, así como su final. No puedo decir que Túrin me caiga bien ya que parece que no hace nada bien, pero creo que es la idea de Tolkien, que sin querer va precipitando su final y a veces me recuerda a Edipo. Igual que el resto, la verdad, pues Morwen no se queda atrás... y es que ya en el mismo relato les dicen que son aciagos, que llevan la desgracia, pero ellos no pueden huir de su destino aunque lo intentan. También se incluye un final añadido digamos, que no aparece en los Cuentos inconclusos. En los apéndices para terminar, como suele ocurrir en las obras de Christopher Tolkien, se habla de la tarea de reunir y crear estas historias como podría haber tenido su padre en mente.
La narración es excelente como siempre, pero hay que estar centrado para leerlo y entenderlo todo pues aunque es agradable de leer es difícil y complicado a veces. Túrin cambia un millón de veces de nombre, se hace referencia a muchos sitios y hay que tener el mapa de Beleriand a mano a no ser que no nos importe dónde se desarrolla la acción. Y es por eso que cuesta leer este tipo de historias que se alejan de El Señor de los Anillos o El Hobbit pero la verdad es que me gusta conocer estas otras historias que te acercan a ese mundo tan vasto creado por Tolkien.


Pasemos ahora a hablar de Beren y Lúthien, edición también ilustrada por Alan Lee y completa de esta historia, segundo libro de la trilogía de los tiempos antiguos. Más que en Los hijos de Húrin, en este se nota mucho más que Christopher Tolkien se centra más en contarnos la evolución de los relatos y la historia detrás de los relatos según los manuscritos de su padre que las propias historias, y a veces no sé si me gusta pues la lectura no es fluida y la hace algo confusa. Pero en fin, vamos a ello después de este inciso.

El planteamiento de este libro es algo distinto que el anterior pues por ejemplo las ilustraciones de las láminas de las que ya hablé antes se presentan de forma más o menos aleatoria a lo largo de todo el libro y no en grupos de cuatro como en el caso anterior. Así, en el índice aparece una especie de índice de las ilustraciones, prefacio y notas sobre los días antiguos donde se nos pone un poco en antecedentes de esta Primera Edad para después empezar con lo que sería ya la historia de Beren y Lúthien. Pero no, de nuevo Christopher nos cuenta el por qué de la edición de este relato y una vez dicho esto la historia viene dividida según los fragmentos que aparecen en todos los demás escritos. Al final viene un apéndice y como siempre una lista de nombres muy útil. En cuanto a la edición, es algo distinta pues la sobrecubierta no está como plastificada sino que la textura es más suave y conforma dos ilustraciones realmente bonitas.
Y ahora ya podemos pasar a lo que es la historia que se narra en este libro. La verdad es que ya la había leído, posiblemente en El Silmarillion o más seguramente en Las Baladas de Beleriand por lo que no se me hizo muy novedosa sino que más o menos ya sabía la historia. Supongo que la concepción del libro es algo confusa pues se limita a ir introduciendo las distintas versiones, sin llegar a crear una. La primera es la más larga de todas, donde se narra el cuento completo, fantasioso, como si se tratara de un cuento de hadas pues no es tan crudo como Los hijos de Húrin sino que la narración es más relajada y aparecen hechos mágicos y situaciones que recuerdan a cuento, aunque sea redundante. La verdad es que me gusta bastante esta versión pues existe la raza de los gatos, aliados de Melkor, y se diferencia a elfos en gnomos y hadas, lo cual es un cambio bien interesante. El siguiente extracto es simplemente de dos páginas en verso, que narra el por qué Beren marcha de las tierras de su familia y la verdad es que después se suceden extractos de otros relatos que tratan sobre Beren, Lúthien y su historia, con lo que hay que ir reconstruyendo el cuento a partir de los trozos que nos proporciona Christopher Tolkien. La verdad es que pronto la primera versión en prosa queda un tanto obsoleta con los cambios que aparecen en los otros fragmentos pues Tevildo pronto desaparece y el aire fantasioso de cuento también, dando lugar a una historia algo más cruda del estilo de El Señor de los Anillos con batallas, la aparición de dos de los hijos de Fëanor que no aparecen en El cuento de Tinúviel, Thû que no es otro que Sauron... Se suceden así pues pequeños fragmentos en prosa y en verso, destacando La balada de Leithian que es el poema más largo. No es difícil de leer y se tratan temas que en esa primera versión no, además de mayores detalles de otros acontecimientos.
La verdad es que la estructura general del libro me enfadó un poco porque quién mejor que Christopher Tolkien para crear la historia de Beren y Lúthien a partir de todo el material del que dispone de su padre, pero en vez de eso se limita a transcribir todos ellos, sin ponerlos en consonancia con los otros (hay en prosa, en verso, unos hacen de Beren humano y otros elfo...) aunque eso sí, nos explica un poco cada uno de ellos como la fecha en la que fueron escritos o al menos aproximada. Los hijos de Húrin tiene capítulos y una historia lógica, no se basa en contarnos trozos sueltos de la historia, es decir, que tiene forma de libro a diferencia de éste. Supongo que habrá gente a la que le gustará este tipo de libros pero a mí no me hacen mucha gracia, y eso que La balada de Leithian y Beren y Lúthien son historias que me gustan, pero me parece que Christopher lo único que ha hecho con esto es nada, simplemente reunir todo lo que tiene en un libro pero sin orden ni concierto, cuando podría haber creado su historia pues si él no lo hace, nadie lo hará (y sí, ahí va una referencia a Galadriel). Aparte de eso no hay que negar que la edición es muy bonita y las ilustraciones preciosas, aunque me falta un índice con todos los relatos que aparecen en el libro. Supongo que tengo sentimientos encontrados con este libro porque me gusta pero tenía expectativas muy altas y no es lo que esperaba.


Por último para cerrar la trilogía tenemos La caída de Gondolin, libro que salió este año 2019 y un año más tarde que la edición inglesa. De nuevo en este caso nos encontramos con un libro más semejante a Beren y Lúthien que a Los hijos de Húrin en cuanto a estructura y composición, pero primero hablemos de la edición y luego ya me centro en lo demás.

La edición del libro es preciosa, así sin ambajes. Es de tapa dura con sobrecubierta pero no sabría definir el papel que es suave pero resistente. Si lo quitamos simplemente aparece un tomo negro con el título en el dorso y la portada ni siquiera conforma una ilustración completa si no que son dos dibujos distintos: cuando Tuor ve Gondolin en todo su esplendor y cuando se le aparece Ulmo, que creo que es de las escenas que más me gustan. De las ilustraciones poco puedo decir que no se dijera ya sobre Alan Lee en la primera reseña así que nada, solo decir que tanto sus dibujos como las láminas me encantan, y creo que ya no podría imaginar el mundo de Tolkien sin él. Lo primero que aparece es un índice y seguidamente la lista de las láminas, después el prefacio y el prólogo, pudiendo dar a continuación inicio ya a la historia de Gondolin. Finalmente hay una lista de nombres, unas notas adicionales, dos árboles genealógicos y un mapa, pero el detalle del mapa me ha encantado. Se aprecia mejor en la foto pero hay dejada una hoja en blanco para que puedas desplegar el mapa y seguir leyendo con comodidad y la verdad es que es un detalle que me ha parecido maravilloso. La edición se nota cuidada, con los dibujos, las ilustraciones y ese genial mapa pero ya hacia el final empecé a encontrar muchas faltas y errores ortográficos que me molestaron bastante pues uno puedes pasarlo, pero había unos cuantos. En fin.
Pasemos ahora un poco a la historia y a la estructura del libro. Se empieza con el primero de todos los relatos, la semilla que germinaría en la historia aparecida en los Cuentos inconclusos de Númenor y la Tierra Media que también se incluye aquí, pero por desgracia nunca se terminó. Pero en fin, lo que plantea Christopher Tolkien es ir presentando todos los fragmentos de la historia que hay entre las publicaciones y notas de su padre en orden cronológico. Eso hace que leamos la misma historia un total de seis veces, todas ellas con pequeños cambios pero que se hacen ya sustanciales en la última versión que aparece en los Cuentos inconclusos, pero que queda inacabada. A pesar de eso, se añade al final el cómo terminaría la historia, de forma esbozada, y es un detalle que me ha gustado mucho porque por fin se habla de Eärendil, de la desaparición de Beleriand y otro detalle curioso que relaciona esta historia directamente con El Silmarillion (que todavía no he releído y que tenía pendiente).También al final aparece directamente un escrito de Christopher acerca de las diferencias más remarcables de entre todas las historias, lo que ayuda bastante a aclarar las ideas y la evolución del texto, pues hay que decir que leer este tipo de libros, donde se presenta la misma historia en todas sus formas, hace que no den ganas de leer muy de seguido porque vas a leer lo mismo, y eso lleva también a que olvides ese tipo de detalles por lo que una aclaración al final no viene de más.
La historia de Tuor siempre me llamó más que la de Túrin, tal vez porque no era tan catastrófica y el personaje de Tuor pues... no tiene nada que ver con Túrin, menos mal. No sabría cómo calificarla pues aunque narra también la caída de una de las ciudades de los elfos, la última, está enfocada de otra manera y Tuor se nos presenta no como el causante si no como el salvador, aunque finalmente no sirve de nada, y eso no cambia en ninguna de las versiones. La primera versión podría ser como un esbozo en el que se presentan todos los elementos de la historia, pero es la última la más rica en detalles a mi parecer, y la que tiene las escenas que más me gustaron como la de Tuor descubriendo las ruinas de Vinyamar y la aparición de Ulmo, en la que le cuenta el cometido que ha de desempeñar. Las imágenes que se sustraen de esto la verdad es que me resultaron preciosas, y al menos una de ellas la tenemos en la ilustración de Lee; y también tenemos el pequeño cameo que hace Túrin cuando busca a Finduilas. De alguna manera me recuerda a Beren y Lúthien ya que en la primera composición se le da cierta importancia a la relación de Tuor con Idril, de nuevo un humano y una elfa, de los que nacerá Eärendil y a su vez Elrond, al que todos conocemos. No sé por qué pero es una constante realmente en la obra de Tolkien, solo que Túrin es algo especial. En general creo que es una historia bastante triste, cosa que ya podía descubrirse por el título, pero de verdad que Tolkien crea unas imágenes muy bonitas, aún cuando habla por ejemplo de la destrucción de la ciudad. Tal vez sea porque ya me acostumbré a su horrible estructura pero creo que es el libro de la trilogía que más me ha gustado de todos.


 
En verdad, a pesar de que parezca que la reseña de Beren y Lúthien sea negativa no lo es, porque la historia en general me gusta, igual que la de Túrin (aunque se haga un poco de odiar) pero es difícil dar una opinión sobre obras inacabadas. Supongo que la historia en sí que más me gusta es la de Tuor con ese final tan agridulce pero igual que en Beren y Lúthien, la estructura del libro sigue sin convencerme. Pero en fin, espero que se haya entendido y nada, ya volveré por aquí~~

Comentarios

  1. Holaaa (。◕ ‿ ◕。)/ Tsukko, bueno no te voy a mentir yo de libros no sé casi nada este año de suerte leí "Yo antes de ti" pero después de eso ninguno ha logrado despertar mi maldito interés xD así que comentare muy superficialmente por lo que nos muestras.

    Primero he de decir que siempre me han agradado los libros de cuentos cuando pequeña mi padre tenía uno y amaba los dibujos que salían.


    Espero puedas pasarte que estés bien!

    穛 S4Ku SEK4i®

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Saku :)
      Pues ese que mencionas no lo conozco. A mi me pasa al contrario, enseguida tengo una lista infinita de libros que quiero leer... También me gustan mucho los libros de cuentos en parte por los dibujos, y la verdad es que aunque estos no sean cuentos tienen unas ilustraciones preciosas *o*

      Eliminar

Publicar un comentario