Mi experiencia con la ortodoncia

Pues bueno, me apetecía hablar de esto. Y para aclarar antes que nada, no van a haber fotos porque bueno, sí me fui haciendo para ver cómo iba evolucionando el tratamiento pero las fotos de bocas y de dientes y tal me dan un poco de asco así que... nos lo he ahorrado a todos. Así que bueno, hace algo más de año y medio que me puse aparato dental y no por gusto sino por necesidad. Lo llevaba necesitando muchos años pero nunca encuentras el momento de ponerlo porque es un gasto inicial alto, además de la búsqueda de un dentista bueno, cosa que siempre lleva su tiempo.

Primero fui al dentista de mi pueblo en el que me timaron, para qué mentir, ya que yo iba por otra cosa y solo supieron hablarme de que necesitaba aparato, como que era una presa jugosa porque el aparato costaba infinitamente más de lo que iba a hacerme en ese momento (una caries, un milagro casi viendo la cantidad de azúcar que tomo). Además, después de ver las radiografías que tuve que hacerme en una clínica privada y que pagué con mi dinero y que no me han devuelto, lo primero que me dijeron es que me iban a quitar la única muela del juicio que tengo. Porque no tengo más, no hay más. Esto lo vería del todo lógico si la muela hubiese estado mal, si la raíz fuese un follón o si fuera a salirme mal y joderme el resto de dientes pero es que mi muela es perfecta: no me dolió al salir, no sabía que la tenía y su raíz y colocación es maravillosa, casi mejor que la de los otros dientes. Así que decidí que no quería ese dentista (que solo abre tres días a la semana, si tienes una urgencia tienes que irte a Valencia, que no es que esté cerca).

El siguiente que probé fue el de mi hermano, ya que él estaba muy contento. Está muy lejos de donde vivo pero es asumible. Desde el principio me enseñaron fotos de otra persona que tenía el mismo problema que yo y cómo le quedó a ella, me dieron garantías y me dijeron que mi muela se quedaba en su sitio así que ya no tuve que buscar más. También me dieron un presupuesto desde el principio (cosa que no me dieron los de mi pueblo) y me dijeron que en un año y medio / dos años, ya terminaría el tratamiento.

Al principio lo que me hicieron pues fue un estudio con un molde que sabía a fresa y no sé si al mes ya podían ponerme el aparato. No recuerdo mucho porque me da el sueño cuando me siento en la silla esa con la luz pero el que me pusieron era la versión light y yo no lo sabía. Los braquets no te enteras cuando te los ponen, el problema son los hierros que los unen, además de que no me pusieron en todas las muelas como para que te vayas acostumbrando. La primera comida no me la pude comer, duelen todos los dientes y es un dolor extraño. No puedes masticar y eso de que choquen unos con otros... aunque eso no fue lo peor, fueron las llagas que se me hicieron. Pero avancemos un poco. A mí tenían que ponerme gomas y eso significó llevar como enganches para ponerlas, unos enganches que me produjeron más llagas, además de que el cambio que se estaba produciendo hacía que me mordiera todo el tiempo y me hiciese heridas y sí, más llagas aún. En la recta final me pusieron cuatro gomas con cinco enganches y al principio fue algo duro porque casi no podía abrir la boca y eso pero a todo se acostumbra uno. Cuando me cambiaban los hierros, que siempre me dolía muchísimo el de la mandíbula inferior, no podía comer bien en unos días, pero una vez pasados ya podía comer con total normalidad. Me decían que si me dolía mucho que tomara algún antiinflamatorio pero nunca me hizo falta, ya que nunca me ha hecho daño nada aparte de molestarme para comer al principio y el cambio de hierros de abajo, que solo duele en el momento. Tampoco se me saltó ningún bracket y eso que he comido bocatas sin problemas (cosa que me dijeron que no hiciera), y también he comido con las gomas por pereza hasta que se saltó y se rompió alguna y dejé de hacerlo. Las gomas también me comentaron que dejara de usarlas si me dolían pero esto tampoco me pasó en ningún momento y las llevé todo el tiempo que me indicaron: al despertarme ponerme unas nuevas, quitarlas al comer y al irme a dormir tirar esas y ponerme otras. Creo que eso hizo que la cosa fuera más rápida.

Para tratar las llagas lo que hacía eran pociones curativas, esto es, té verde (que es antiinflamatorio) con salvia, que va muy bien para este tipo de heridas. Y así a los dos días se me curaban. Y bueno, lavarme los dientes dos veces al día (tres sería mejor pero... pues pereza) e importante, tomar el enjuague, ya que comprobé que si dejaba de usarlo me salían más llagas aún. No puedo dar muchos consejos ya que no me ha pasado nada, ni me salté braquets, ni me dolió en exceso, ni me dolieron las gomas ni nada, casi ni me he enterado y supongo que es una suerte. Ya prácticamente al final sí que tuve algún problema porque me empezaron a salir muchas heridas e inflamaciones y tuve que tratarlas con una pasta y un enjuague especial, pero no por el aparato o las gomas si no por la bajada de defensas y el constipado y todas esas cosas. Con la pasta y eso se me curó todo bastante rápido, ya que tenía que tener las encías bien para que me quitaran el aparato y me pusieran el retenedor sin problemas.

Al final, tal y como me dijeron, al año y medio ya me quitaron el aparato cumpliendo con el plazo. Bueno, un mes más por tema de fechas y de que me puse mala y tuve que estar una semana más pero sí, un año y siete meses cuando yo esperaba estar como dos o tres años ya que la cosa fue muy bien en general. Quitarlo fue casi peor que ponerlo aunque apenas me enteré de cuando me quitaron los hierros o los braquets, solo cuando me hicieron la limpieza así a fondo es cuando me hicieron más daño pero en verdad poco más. Me pusieron también los retenedores arriba y abajo, que son como un hilo azul que apenas se ve pero que se nota por la forma en que está pegado digamos. Al principio es un tanto molesto pero luego te acostumbras, como con el aparato. No vas a dejar de notarlo pero deja de molestarte. Me hicieron unos moldes de nuevo para las férulas, esta vez con sabor a vainilla, y ya está, ahí terminó el tratamiento. Mis encías, que ya estaban inflamadas de base porque cuando estoy mala se me inflaman, pues hizo que fuera un tanto difícil poner el retenedor de arriba, y además todo el proceso de quitar el aparato hace que estén también sensibles y algo sangrantes así que... no mejoraron mucho después de eso. Lo bueno es que el retenedor de arriba no se cayó, pero en dos o tres días después de todo el proceso las encías sangran un poco al cepillarte y es normal.

A la semana siguiente volví a recoger las férulas que tendré que llevar todas las noches para que los dientes no vuelvan a moverse (y con el dinero que costó pues casi que hacer caso). Son como el aparato invisible, como una funda extraña y transparente. Al principio tuve que ponérmelo más tiempo y no solo por las noches y descuadró un algo mi horario pero bueno. Su mantenimiento no es muy complicado, hay que limpiarlas con el cepillo y algo de pasta, enguajarlas bien y secarlas un poco, pero lo importante es guardarlo en la funda para que no se rompan. Hay que estar pendiente, eso sí, pero la mejor forma de cuidarlas y desinfectarlas es con las pastillas esas de las dentaduras postizas que también funcionan para las férulas y que las dejan bien limpias, la verdad. Aún estoy probando con esto así que no puedo decir mucho, solo que me parece más higiénico que limpiarlas simplemente con el cepillo pues nunca quedan limpias del todo.

A la próxima visita me enseñaron las fotos del antes y el después y... ya está creo. De lo que me he dado cuenta es que mis encías se suelen inflamar cuando estoy baja de defensas y demás, por lo que tengo que tener cuidado con la retención para que no salte. Cosa que pasó y no me di cuenta. Ante esto lo mejor es ponerse las férulas todo lo posible hasta poder ir al dentista, porque poco a poco los dientes harán camino y volverán a su lugar y no es lo que queremos. Como solo se me soltaba una parte me costó darme cuenta de lo que pasaba pero el primer indicativo claro de que la retención se ha soltado es que por la mañana al quitarme las férulas y bueno, escupir porque tienes un regusto asqueroso, salía sangre porque estaba inflamado. Y el segundo es que al ponerte las férulas notas como presión en esa zona. No duele y eso es lo bueno pero bueno, veremos cómo avanza la cosa en ese sentido. Así que nada, esa es mi experiencia con la ortodoncia y un poco lo que vino después. No sé si haré alguna actualización en algún momento pero ya veremos, porque creo que aún me queda camino por delante~~

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